Los ciberataques se volvieron virales en los últimos años y cada vez son más los afectados por los delincuentes virtuales. Compras, robo de identidad, phishing y muchas otras formas de robar a través de las redes sociales y las plataformas digitales.

De la mano de la pandemia llegó el crecimiento de la virtualidad, que expandió los espacios donde los delincuentes pueden atacar. Muchos informes, encuestas y trabajos alrededor del mundo dan cuenta del aumento de los ciberdelitos que impactan a compañías como a usuarios independientes.
Los ataques pueden darse a través de diversos programas maliciosos, pero también pueden ocurrir a través de ataques con ingeniería social, que no requieren de la instalación de un software dañino sino que se da por el robo de datos confidenciales a través de engaños.
Cuantos más lugares se utilicen para disfrutar de las ventajas de la red, más oportunidades tendrán los estafadores de explorar y explotar, ya sea para estafas de herencias, diferentes tipos de estafas de compras y ventas, falsas ofertas de trabajo, falsos sorteos y loterías, e incluso fraudes de citas, solo por mencionar algunas de las más comunes que circulan.

Ingeniería social o phishing

No todos los ciberdelitos se dan a través del uso de algún programa o software, también se pueden dar por medio de técnicas de ingeniería social o engaño. Eso alude a métodos que usan los ladrones para lograr que sean los propios usuarios quienes les brinden sus credenciales de acceso (usuario y contraseña) a cuentas bancarias, correos, perfiles de redes sociales y hasta Whatsapp.
Según un informe de IBM, un 29% de los ciberataques que se dieron en el 2021 en la región surgieron a raíz de credenciales robadas. Y esto estrechamente se conecta con ataques pishing.

Las denuncias de ciber fraudes aumentaron casi un 200%durante el primer trimestre de 2022 en comparación con ese mismo período del año 2021.

¿Cuales son los anzuelos para este tipo de estafas? Temas de moda, regalos, promesas de inversión, compras y ventas. A la hora de orquestar la estafa, los ciberdelincuentes buscan generar un anzuelo atractivo. Así que enviarán un correo, mensaje o incluso llamarán por teléfono. Muchas veces, dicen que son representantes de algún banco, institución o que los contactan para darles algún tipo de beneficio o crédito. Para lograr que el usuario de sus claves logran tener la atención de este y su confianza, a veces pueden pedirlo de forma directa y en otras oportunidades lo hacen sin que este se dé cuenta.


 

El aumento de las estafas virtuales en el último año

Las denuncias de estos fraudes aumentaron casi un 200% durante el primer trimestre de 2022 en comparación con el período de 2021, según un informe que se presentó del Observatorio de Cibercrimen y Evidencia Digital en Investigaciones de la Universidad Austral (OCEDIC).
En la Argentina se registran en promedio 4.800 fraudes cibernéticos por mes en diferentes modalidades. Principalmente, mediante estafas por Whatsapp, phishing, usurpación de identidad y “cuento del tío”.
El estudio reveló que en el 90% de los casos la conversación migra de Whastapp, plataforma desde la cual el autor del delito se contacta de manera directa con el usuario. Pero esta no es la única plataforma que se ve directamente involucrada en estos crímenes virtuales, Facebook e Instagram en menor medida también son medios utilizados por los delincuentes para llegar a diferentes usuario y estafarlos.
A través de compras online suelen hacerse estafas que involucran al comprador o al vendedor. El cuento del tío es muy común en estos casos y muchas veces se llega a tener la confianza de quien está del otro lado, al punto que les sacan todos los datos necesarios para luego quitarles dinero de su HomeBanking, transferencias bancarias, productos inexistentes y muchas otras.

 Prevención de los ciberataques

Es importante estar informados acerca de cómo funcionan las campañas de phishing para evitar ser víctimas de estafas y suplantación de identidad.
– No descargar adjuntos que llegan por correo o mensaje con supuestos beneficios. Tampoco ofrecer datos confidenciales por teléfono.
– Evitar dar click en links desconocidos por diferentes servicios de comunicación por que es posible que sean páginas donde se solicitan credenciales de acceso que luego serán utilizadas para ingresa a otras cuentas.
– Contar con contraseñas seguras y no usar las mismas en todas las cuentas.
– Activar el segundo factor de autenticación de las cuentas que lo permitan.
– Evitar publicar datos sensibles en las redes sociales o fotos que ayuden a los ciberdelincuentes a deducirlos.
– Recordar que los códigos de seguridad que se reciben vía SMS o correo electrónico no deben compartirse con nadie.
– Mantener el sistema operativo actualizado y contar con seguridad.

A través de compras online suelen hacerse estafas que involucran al comprador o al vendedor. El cuento del tío es muy común en estos casos.

¿Cómo denunciar un ciberataque?

La Asociación Civil Argentina Cibersegura, cuyo objetivo es concientizar a la comunidad sobre el uso seguro de Internet y las tecnologías, difundió una breve guía para saber qué se debe hacer si hay que enfrentarse a un delito informático.
Como consejo para salvaguardar la evidencia: no borrar, destruir o modificar la información que se posea en la computadora o celular relacionada al hecho; nunca reenviar los mensajes (correos electrónicos) constituidos del delito; realizar inmediatamente la denuncia ante la dependencia policial más cercana al domicilio del usuario.
En la ciudad de Buenos Aires se pueden denunciar delitos de material de abuso sexual infantil, grooming, acceso sin autorización a un sistema o datos informáticos, daños informáticos y las controversiones de difusión no autorizada de imágenes o grabaciones y por último la suplantación de identidad.
La denuncia se debe llevar a cabo en la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas del Ministerio Público Fiscal de la ciudad. Se puede realizar de forma online, anónimamente o de forma identificada. Otra opción es llamar al 0800 33 (FISCAL) 347225. ©

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