Amo de casa

El instagramer de la limpieza del hogar que no para de acumular seguidores en redes sociales y sueña con tener su “propio reality”. Es  Soy Amo de casa y es el primer influencer varón que da tips para el hogar hace ya varios años.

La cuarentena sorprendió a más de uno en su casa haciendo las tareas domésticas y, en muchos casos, algunos no tenían idea de cómo hacerlo. El influencer de la limpieza Néstor (quien prefiere mantener anónimo su apellido), más conocido como @soyamodecasa en Instagram, reivindico no solo el orden y la limpieza del hogar, sino también el reparto equitativo de las tareas dentro de las familias.
“Soy amo de casa” se convirtió en una cuenta de referencia que ya tiene más de 340 mil seguidores. Además, público un libro, tiene una página web con todos los tips, una tienda online donde vende productos para limpiar los hogares y también trabaja en televisión, escribe columnas en diferentes medios y da talleres online sobre cómo tener la casa en orden y los beneficios que eso genera.

¿Cómo te convertiste en @soyamodecasa?
En 2018 creé la cuenta de Instagram @soyamodecasa, hacía tiempo que tenía la idea en la cabeza pero no me animaba a concretarla un poco por miedo a exponerme, o a no querer contar demasiado de mi vida personal. Un viernes salí de la oficina (trabajaba en una agencia de publicidad como diseñador) y compré dos palos de agua en un puesto de flores para poner en unas macetas que había comprado. Esa compra fue el disparador que me motivo a dejar de postergar lo que tenía ganas de hacer, abrí la cuenta para dar los tips de como plantar y cuidar esas nuevas plantas (que todavía me acompañan, los tips eran buenos jajaja). Y así fue que, a pesar de haberlo pensado por mucho tiempo, medio de casualidad me terminé animando y subí mi primer foto que decía “Bienvenidos/as, tu casa no va a ser la misma”. Lo que no sabía es que la vida me iba a terminar cambiando a mí. Ese mismo día la foto tenía muchísimos likes y los/las seguidores no paraban de aumentar, para mí que estaba acostumbrado a llegar a los 20 likes solo cuando cumplía años me parecía una locura.

¿Por qué el nombre de tu cuenta es “soy amo de casa”? ¿Qué pensás respecto del tabú que sigue existiendo alrededor del concepto de hacer los quehaceres del hogar?
Porque en la cuenta muestro “mi vida como amo de casa”, la manera que yo tengo de hacer las cosas, mi propio método.
Sobre todo me motivaba ocupar un lugar que estaba vacante que era el del hombre al frente de las tareas domésticas, no porque yo sea el único sino porque nadie lo estaba contado. También quería “reivindicar” de alguna manera a las labores del hogar que tienen tan mala prensa y que tendemos a asociar a las personas organizadas y limpias con trastornos u obsesiones, yo quería contar que no son un fin en sí mismo, sino un medio para ganar calidad de vida, vivir mejor y más felices. Las tareas domésticas no son malas, todo lo contrario, lo que está mal es que en las casas no se hagan en equipo y en familia. La mujer hace rato que ocupa un lugar en el mercado laboral, pero esa inserción no fue acompañada por la incorporación del hombre a las tareas del hogar. Es como que la sociedad les permite desarrollarse en otras áreas pero siempre y cuando vuelvan a casa y sigan haciendo lo que hacían antes. Desde el discurso todos (o casi todos) estamos de acuerdo en que las tareas del hogar no tienen género, pero a la hora de los bifes en Argentina el 73% de los hogares tiene a la mujer como principal responsable y en las casas en que se comparten las tareas no es de forma equitativa. Los varones “ayudan”, “auxilian” y eso da a entender que la responsabilidad sigue siendo femenina. En mi caso yo siempre fui “amo de casa”, por suerte en mi familia las tareas no tenían género, ni edad y todos colaborábamos con ellas. Desde que tengo memoria hago mi cama, lavo platos y guardo mi ropa.

¿Aparte del Instagram tenes una web, das cursos online y haces vídeos de Youtube, queda tiempo en tu vida para más cosas?
Es difícil separar la vida del trabajo cuando de alguna manera vos mismo sos “la empresa” y “el producto”. Lo que empezó como una cuenta de Instagram hoy son workshops (ahora online), charlas, un sitio web con tienda en la que tengo mis productos, un libro que salió el año pasado en plena cuarentena de la mano de Penguin Random House y una columna en Mañanas Públicas por TVP.
Pero al igual que con las cosas de la casa la organización me es clave para el trabajo. Organizo el contenido de Instagram por mes, grabo todos los vídeos en un solo día, me puse horarios para responder los mensajes privados que es una de las cosas que más tiempo me lleva (llego a recibir hasta 3 mil por día). De esa manera tengo tiempo para encontrar el equilibrio entre ambas cosas.

¿Cómo surge la idea de tener una tienda online donde vendes productos que tienen que ver con los mismos tips que das para el cuidado y limpieza de la casa?
Nunca me hubiese imaginado tener una tienda en la que vendería vinagre en bidones, bicarbonato por kilo, mopas o pantumopas. La tienda es una respuesta a la necesidad de la comunidad que formamos en Instagram. Todos los días recibía mensajes preguntándome a dónde podían comprar el vinagre, el bicarbonato, donde conseguían una buena mopa o de donde eran las pantumopas que yo usaba. Entonces un día pensé en “cerrar el círculo” y dar de alguna manera la solución completa. Doy los tips y también en mi tienda podes encontrar todo lo necesario para llevarlos a cabo. Y ahora siempre que me preguntan dónde se consigue tal o cual cosa la respuesta es más simple: “en mi tienda online”.

Actualmente, te contactan muchas marcas para que promociones sus productos en tus redes, ¿cómo fue al principio eso?
Enseguida empezaron a aparecer marcas que querían que generemos contenido juntos. La primera fue una pinturería. La premisa siempre es generar contenido de valor para la comunidad y que la marca lo acompañe, de esa manera se da a conocer una marca o producto pero siempre hay algo que a la comunidad le sirve y resulta útil. Siempre pienso “este posteo lo subiría igual aunque no estuviese la marca”. Eso es súper importante para mantener la confianza que se creó en la cuenta.

¿Cómo fue tu primera vez en la televisión? ¿Qué significó para vos comenzar a trabajar en el medio?
La primera vez que fui a la tele fue en julio de 2018 a un programa que conducían Nicole Neumann y Pato Galván. Es muy loco porque Instagram te abre las puertas de programas o personalidades que no lo podes creer.
Me entrevistaron en estos años en muchos programas de tele y radio y en enero me llegó la propuesta de sumarme a Mañanas Públicas con Gabriel Corrado y Mariela Fernández en TVP. Al principio estaba aterrado pero ahora la paso bárbaro y estoy aprendiendo mucho. Son otros tiempos, otra forma de contar las cosas, están las cámaras, la cucaracha, interactuar con los compañeros. Es una linda experiencia que además te acerca a otro público también.

Si tuvieras que aconsejar a un amo/a de casa ¿cuáles serían las cosas más importantes a tener en cuenta a la hora de organizarse semanalmente para cumplir con la limpieza, los hijos/as, la comida, etc?
Organizarse y evitar la postergación. Lo que no limpias hoy se acumula con lo que no limpies mañana. Y el día que la cosa no dé para más vas a tener que pasarte un fin de semana entero limpiando y resolviendo un caos. Gastando tiempo, energía y productos. Entonces, lo mejor es evitar la postergación, limpiar lo que se ensucia en el momento (es más fácil lavar un plato que lavar todos los de la semana juntos).
La clave es armar rutinas de limpiezas diarias, semanales y mensuales que hacen que las tareas se vuelvan hábitos y se hagan prácticamente “solas” y sin esfuerzo. Y obviamente quien no viva solo/a tiene que incorporar e involucrar a su familia. No son parte del problema, son parte de la solución.


¿Cómo afectó la pandemia en tu trabajo? ¿Pensas que al estar encerrados más personas recurrieron a las redes sociales para buscar información, comprar productos o simplemente entretenerse?
La pandemia hizo que todos/as pasáramos más tiempo en casa y que muchas personas se tengan que enfrentar a la titánica tarea de mantener un hogar en condiciones por primera vez. Al final, el piso no brillaba por arte de magia, la ropa no se lavaba sola y la comida no se reproducía en las alacenas. Vivir en una casa limpia y ordenada mejora el ánimo y el humor y hacerlo entre todos/as mejora los vínculos. En este contexto esto es fundamental.

Me gustaría hacer un reality e ir a la casa de gente que le cueste mucho limpiar y que juntos cambiemos esa casa.

En una primera instancia de la cuarentena, las consultas estaban más vinculadas a cómo hacer una correcta limpieza y desinfección, cómo organizar las compras, el menú semanal y la alacena. Y a medida que pasaban los días ya tenían más que ver en cómo resolver esas tareas que se venían postergando hace mucho, que con mucho tiempo en casa se hacían notar más. Y ya en esta instancia el foco está puesto en conseguir utensilios que faciliten la limpieza, así que la mayoría de las preguntas están relacionadas a la mopa o las aspiradoras robots que hacen que la limpieza sea más rápida, fácil y eficiente.
Lo interesante es que son todas cosas de las que en la cuenta ya veníamos hablando hace mucho tiempo, de hecho mis rutinas no cambiaron tanto en la pandemia (algunas cosas obviamente se hacen con otro cuidado y frecuencia), con esto quiero decir que si “aprovechamos” este tiempo para aprender e incorporar buenos hábitos y rutinas cuando volvamos a la normalidad va a ser muy fácil vivir en una casa a la que siempre queramos volver.

¿Qué proyectos tenes para el futuro? ¿Hay alguno que ya se esté realizando que nos puedas adelantar?
Todo se dio tan rápido y sin pensarlo mucho que me cuesta planificar a futuro. Algo que me gustaría hacer es una serie tipo reality e ir a la casa de gente que le cueste mucho limpiar o tenga muchas cosas y que juntos cambiemos esa casa por completo simplemente limpiando y organizando.

¿Qué les dirías a todos los hombres que cumplen el rol de amos de casa? ¿Cuál es tu consejo más importante para ellos?
Los varones somos un poco “cómodos”, nos cuesta más salir del molde. No nos juntamos entre nosotros a debatir el porqué de cargar con todo el peso económico de una familia, porqué teníamos que ser los que castigábamos, los que no dicen “te quiero” a sus hijos, los que no lloran. Las mujeres nos están dando la posibilidad de ocupar esos lugares que se creían femeninos. Nos habían educado para que una esposa nos espere con la cena hecha, que mamá siempre nos iba a lavar las medias o que “una chica” iba a venir una vez por semana a lavarnos los platos. De repente, no solo las mujeres rompieron con mandatos, lo que entendíamos como familia también cambió.
Hay gente que vive sola, con amigos, familias ensambladas, familias de dos varones, dos mujeres, con o sin hijos, con o sin mascotas, hay miles de combinaciones. Y en todas esas casas tiene que haber amos/as de casa. Porque en definitiva todos lo somos, ser amo/a de casa no es limpiar y ordenar compulsivamente, es apropiarse del lugar en el que vivimos (sea como sea) para convertirlo en nuestro lugar en el mundo. Y eso es responsabilidad de todos/as. Grandes y chicos, varones y mujeres. ©

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